La pandemia de los últimos años ha provocado un aumento del uso de tecnologías de videoconferencia para el tratamiento y el asesoramiento psicológico. Sin embargo, la importancia del contacto visual es un factor que a menudo se pasa por alto en esta situación. Según las investigaciones, mantener el contacto visual durante las videoconferencias puede mejorar en gran medida la eficacia de la sesión de terapia y la comunicación en general.
Según un estudio de la Universidad de California, los pacientes que establecen contacto visual con sus terapeutas durante las sesiones de videoconferencia se sienten más a gusto y confían más en ellos. Según el estudio, establecer contacto visual con el terapeuta fomenta un sentimiento de implicación y conexión, lo que mejora la relación terapéutica y la eficacia de la terapia.
Otro estudio de la Universidad de Gales del Sur descubrió que hacer contacto visual durante la terapia ayuda a la comunicación y la comprensión en general. Según el estudio, los terapeutas que mantenían el contacto visual con mayor frecuencia durante las sesiones de vídeo eran más capaces de persuadir a los pacientes para que comprendieran y participaran en la terapia.
Se ha demostrado en estudios que hacer contacto visual durante conversaciones por vídeo mejora las relaciones terapéuticas y la comunicación, además de reducir los sentimientos de soledad y aislamiento de los pacientes. El contacto visual entre los pacientes y su terapeuta puede ayudar a reducir la sensación de separación que es un problema típico en las sesiones de terapia por vídeo, según una investigación de la Universidad de Illinois.
Por lo tanto, establecer contacto visual durante los chats de vídeo para psicología puede mejorar enormemente la relación terapéutica en general, la comunicación y los sentimientos.